La compleja relación que mantienen la gobernadora, María Eugenia Vidal y el presidente de la Cámara Baja de la Nación, Emilio Monzó, pareciera empezar a acomodarse de cara al año electoral. La tregua se terminó de pactar en un almuerzo en la sede porteña del Banco Provincia. Ambos concurrieron con su primera plana. Por el lado de Vidal, estuvieron su jefe de Gabinete, Federico Salvai y su ministro de Gobierno, Joaquín De la Torre. Por el lado de Monzó, se hicieron presentes el viceministro del Interior, Sebastián García De Luca; el diputado bonaerense, Marcelo Daletto y el senador provincial, Gabriel Monzó.
La previa al encuentro estuvo cargada de mucho revuelo, sobre todo porque la semana pasada se pospuso el almuerzo, debido a una fiebre que tuvo la Gobernadora. Pero a su vez, el tablero interno del PRO, en las esferas de poder, muestra que Mauricio Macri delegó enorme poder en su jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien no tiene buena relación con Monzó y hasta han tenido serios enfrentamientos. Esmerilado, el titular de la Cámara Baja Nacional no tuvo más remedio que apaciguar las aguas con Vidal y acoplarse a carril.
Sin embargo, contrario a tiempos anteriores, Vidal y su equipo acercan a Monzó y su tropa al terreno bonaerense y hasta escuchan consejos para encarar el tramo electoral de este año. En Gobernación destacan que los almuerzos con Monzó “se van haciendo costumbre” y observan esta situación como positiva. En general, desde ambos espacios, según pudo saber este portal, destacaron el encuentro como “una buena reunión de trabajo”.
Los comensales hablaron de generalidades de la coyuntura política y su situación, pero sobre todo -pensando en clave electoral- dialogaron sobre opciones de como “reforzar” los distritos que no gobierna Cambiemos. El tablero advierte que la Tercera Sección Electoral aún sigue siendo un terreno donde el oficialismo no puede penetrar con fuerza. Desde el entorno de Vidal rescatan el aporte que puede dar Monzó y sus alfiles: “Están incluidos”, afirman, para despejar cualquier tipo de dudas.
Así mismo, hubo gestos de Vidal hacia Monzó en cuanto a darle espacio en el armado de las listas legislativas y refugiarlo en esta coyuntura. Desde hace meses, la idea que ronda en Calle 6 es que Monzó tenga mayor incidencia en el armado de las listas para legisladores nacionales, pero las listas para legisladores bonaerenses estén completamente en manos de Vidal y su entorno.
