En una nueva demostración de falta de sensibilidad social, el Presidente Macri oficializó hoy el veto a la ley de expropiación del hotel cooperativo BAUEN, aprobada el 30 de noviembre en la Cámara de Senadores de la Nación.
Resulta especialmente cruel la actitud del Ejecutivo, de publicar el veto en el Boletín Oficial el día del vencimiento del plazo, generando en los trabajadores hasta último momento una expectativa de resolución favorable, cuando está claro que el veto presidencial era una decisión tomada desde la fecha misma de la sanción de la ley.
Sobre la base de una supuesta “erogación presupuestaria muy importante”, la gestión de la alianza Cambiemos pretende echar por tierra la solución política a un conflicto jurídico de casi 14 años, solución a la que se arribó gracias al consenso de diversas fuerzas políticas que durante varios años trabajamos de manera conjunta para sintetizar en una iniciativa parlamentaria la declaración de utilidad pública y la expropiación de los inmuebles y de todas las instalaciones del hotel cooperativo.
En ese sentido, queremos resaltar que el hotel fue edificado con créditos otorgados a un grupo empresario por el Estado nacional entre 1977 y 1978 (durante la última dictadura cívico-militar). Ese dinero nunca fue devuelto por los empresarios que construyeron el hotel, quienes lo cerraron y abandonaron en 2001, dejando en la calle a más de 130 familias.
La ley, que fue aprobada de modo reciente sobre la base de un proyecto del diputado nacional Carlos Heller (Partido Solidario) y asimiló las iniciativas de otros legisladores, es taxativa en un punto fundamental: la suma que deberá abonarse en cumplimiento del proceso de expropiación será cancelada total o parcialmente -según la correspondiente tasación- con los créditos que el Estado Nacional posee con relación a los antiguos dueños por los préstamos contraídos por éstos y no abonados. Este punto de la ley es virtuoso, ya que sería un claro contrasentido que el Estado renuncie a cobrar sus créditos.
Además, no es cierto que la expropiación signifique un gasto para el Estado. Se trata de una inversión, porque las instalaciones se expropian en beneficio del Estado Nacional y se otorgan en comodato a la cooperativa, que para poder ejercerlo deberá -entre otras contraprestaciones- desarrollar en sus instalaciones prácticas relacionadas con el aprendizaje de oficios y establecer convenios con universidades públicas, gobiernos provinciales e instituciones sociales para realizar prácticas de turismo, gastronomía, cooperativismo y diversas actividades socioculturales (ninguna novedad para la cooperativa, ya que todas esas actividades se realizan en el hotel cooperativo desde hace varios años). Además, destinará permanentemente el 30% de sus plazas disponibles a pasajeros del turismo social y para dar cobertura a derivaciones médicas de todo el país, efectuadas a través del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados.
En 2003 los trabajadores del BAUEN recuperaron el hotel, pusieron en marcha el proceso productivo y desde entonces lo gestionan en forma eficiente. La experiencia del BAUEN demostró que la gestión cooperativa es una verdadera alternativa de organización para darle vida a emprendimientos productivos con fines sociales, con la cooperación y la solidaridad como motor y estímulo para el trabajo.
La crisis socio-económica como consecuencia de la implementación de políticas neoliberales, que tuvo su estallido en diciembre de 2001, dejó una enorme secuela de empresas cerradas o abandonadas por sus dueños. El del BAUEN es un ejemplo más de ese accionar empresario.
La lucha de Buenos Aires Una Empresa Nacional (BAUEN) es un testimonio de la lucha del conjunto de las más de 200 empresas recuperadas por sus trabajadores. La defensa del BAUEN y la promulgación de la ley de expropiación son la consolidación del derecho de más de 130 familias a mantener sus fuentes de trabajo y al mismo tiempo son un llamado de atención: las empresas recuperadas son una respuesta a las políticas económicas que se aplicaron en los noventa y que hoy se están volviendo a aplicar en Argentina.
El jueves 29 de diciembre los trabajadores del hotel cooperativo van a anunciar su plan de lucha de cara a una nueva y definitiva sanción. Allí vamos a estar, como siempre, acompañándolos junto a otros dirigentes sociales, políticos, gremiales y del movimiento cooperativo. Los esperamos a partir de las 18 en Callao 360.
Porque el Estado no puede darle la espalda a los trabajadores. Porque las empresas cooperativas ayudan a construir un mundo mejor. En 2017 vamos a seguir trabajando por una nueva sanción con mayoría especial de 2/3 de los votos en ambas cámaras del Congreso de la Nación.
Carlos Heller
Diputado Nacional – Presidente del Partido Solidario
Juan Carlos Junio
Secretario General del Partido Solidario